miércoles, 23 de noviembre de 2011

Flamingo

Si te tumba el mar abierto y el odio te ciega,
yo estaré ahí con balsas y un millón de velas.
¿Por qué cargas un morral de miedo y la montaña nos sosiega?
Y aunque a veces te moleste yo aún te haré la cena.
Otra vez...

Si la espera te entierra en una condena,
con palas construiré castillos de arena.
Y el "¿qué pasa?" te molesta y te pulsa el pecho como una avalancha.
Y aunque a veces te moleste nunca te abandonaré.
Otra vez...

Tu eres mi calma, tu eres mi calma, tu eres mi calma, tu eres mi calma. Tu eres mi calma, tu eres mi calma, tu eres mi calma, tu eres mi calma. Tu eres mi calma, tu eres mi calma, tu eres mi calma, tu eres mi calma. Tu eres mi calma, tu eres mi calma, tu eres mi calma.

La Vida Boheme.

Simplemente, la canción más perfecta.